Aldeas Infantiles SOS se ve obligada a reforzar la protección de los 46 niños y niñas que crecen en la Aldea de San Lorenzo de El Escorial
Tras las últimas medidas adoptadas en torno a la crisis del coronavirus, Aldeas Infantiles SOS está destinando todos sus esfuerzos en la Comunidad de Madrid a reforzar la protección de los 46 niños y niñas que residen en la Aldea de San Lorenzo de El Escorial. Son niños y niñas que crecen privados del cuidado sus padres y cuya guarda y custodia ostenta la organización. Los educadores y profesionales a su cargo han tomado las medidas necesarias para asegurar la normalidad durante los quince días sin colegio, así como para garantizar la seguridad sanitaria de los niños y las niñas y asegurar que siguen con el ritmo escolar.
Sin embargo, ante las últimas medidas de contención tomadas por las Administraciones Públicas, Aldeas Infantiles SOS se ha visto obligada a suspender hasta el próximo 25 de marzo sus Programas de Prevención con niños, jóvenes y familias en la Comunidad de Madrid. Pese a ello, la organización ha decidido mantener activo un servicio de urgencia para atender a aquellas familias que estén en una situación de especial vulnerabilidad.
En concreto, la organización mantendrá cerrados durante estos quince días tres centros de día, un centro de educación infantil y dos talleres profesionales, en los que se atiende anualmente a un total de 433 niños, niñas y adolescentes. A través de estos programas, Aldeas Infantiles SOS ofrece apoyo a las familias en situación de vulnerabilidad para que puedan mejorar sus condiciones de vida y para ayudarlas a cuidar mejor de sus hijos. En ellos también se ofrecen otros servicios adaptados a las circunstancias personales de cada familia, como las ayudas para la adquisición de alimentos o de material escolar.
Aldeas Infantiles SOS muestra, por tanto, una gran preocupación por estas familias y pone de manifiesto la necesidad de adoptar medidas urgentes que les permitan afrontar esta situación sin poner en riesgo el bienestar y la protección de sus hijos. La organización recuerda que las familias monoparentales o aquellas con trabajos precarios y especial dificultad para conciliar su vida laboral con la atención de sus hijos son las más vulnerables.
Aldeas Infantiles SOS apela a la solidaridad colectiva y subraya la necesidad urgente de contar con recursos económicos que permitan hacer frente a las nuevas situaciones de dificultad por las que están atravesando los niños y las familias más vulnerables.