Aldeas Infantiles SOS alerta de que 45 millones de personas necesitan asistencia humanitaria urgente en el sur de África

Emergencias

El cambio climático está haciendo estragos en el modelo de subsistencia de los países del sur de África. Según el informe humanitario mundial de Naciones Unidas para 2020, 45 millones de personas necesitarán este año asistencia humanitaria y protección en 16 países del continente africano. Aldeas Infantiles SOS alerta de esta situación y hace un llamamiento a la comunidad internacional para hacer frente a esta crisis humanitaria.

Los países miembros de la Comunidad de Desarrollo del África Austral, que dependen en gran medida de la agricultura a pequeña escala, llevan años sufriendo patrones irregulares de lluvia, sequías persistentes, ciclones e inundaciones que han afectado negativamente a las cosechas. La temperatura media en esta región del continente africano está aumentando aproximadamente el doble de la tasa global, de acuerdo con las estimaciones del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU.

En Zimbabue, se estima que 3,6 millones de personas -el 38% de la población rural- se enfrentan a la inseguridad alimentaria, y se prevé que esta cifra alcance los 5,5 millones en marzo de 2020. Ayele Sebaro, asesor de los Programas de Emergencias de Aldeas Infantiles SOS en la región, explica que “la escasez de alimentos está provocando que los niños abandonen la escuela y los ancianos y las personas con discapacidad han asumido la responsabilidad de cuidar a los menores cuyos padres emigran en busca de alimentos”. Asimismo, continúa, “debido a su vulnerabilidad, los niños se están viendo obligados a recurrir a mecanismos de supervivencia extremos, como el trabajo infantil, y están siendo víctimas de tráfico de menores, matrimonio precoz y prostitución, que los expone además al VIH y otras enfermedades”.

Zambia es otro de los países más afectados. La escasez de alimentos está causando un incremento en el índice de desnutrición y ha tenido como consecuencia directa un retraso del crecimiento en el 40% de los niños aproximadamente. Los pozos en este país están sobreutilizados, y el acceso al agua potable es cada vez más preocupante. La sequía ha supuesto una carga adicional para las mujeres responsables del cuidado y la alimentación de los niños y la familia.

En Mozambique, dos millones de personas sufren escasez de alimentos y sequía debido al efecto de los ciclones y las inundaciones. “El número de afectados es más del doble que el año pasado”, alerta Ailton Muchave, director nacional de Aldeas Infantiles SOS de Mozambique. Más de medio millón de mozambiqueños aún viven en casas dañadas o refugios improvisados ​​meses después de ser golpeados por dos ciclones que, junto a las inundaciones, han dañado 700.000 hectáreas de cultivos, provocando que muchos hogares necesiten asistencia para subsistir.

Los países de la Comunidad de Desarrollo del África Austral afectados por los desastres naturales relacionados con el cambio climático incluyen: Angola, Botsuana, Comoras, República Democrática del Congo, Esuatini, Lesoto, Madagascar, Malaui, Isla Mauricio, Mozambique, Namibia, Seychelles, Sudáfrica, Tanzania, Zambia y Zimbabue. Esta región no solo requiere asistencia inmediata para hacer frente a la crisis humanitaria, sino una estrategia de apoyo económico coordinada y sostenida en el tiempo para asegurar una rehabilitación sostenible y la construcción de comunidades resilientes.