Aldeas Infantiles SOS reivindica el papel de los abuelos y abuelas en la crianza de sus nietos y reclama más apoyos para los acogedores

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  • Aldeas Infantiles SOS aborda el vínculo de las personas mayores con la infancia en su informe Abuelos y abuelas, ¿qué haríamos sin ellos?, un análisis detallado con el que la organización de atención directa a la infancia reconoce y reivindica su papel en los cuidados y su rol social.
  • Casi la mitad de abuelos y abuelas (46,7 %) cuida a sus nietos de forma habitual y el 28,6 % realiza esta labor diariamente.
  • En España, los abuelos y abuelas son quienes suelen asumir el cuidado de los niños y niñas que crecen en acogimiento en familia extensa, es decir, con algún miembro de su familia biológica. Casi 11.000 niños y niñas viven esta modalidad de acogimiento.

DESCARGA EL INFORME: https://cms.aldeasinfantiles.es/uploads/2025/07/informe-abuelos-que-hariamos-sin-ellos-2025.pdf

Madrid, 22 de julio de 2025. Con motivo del Día de los Abuelos, que se celebra el 26 de julio, Aldeas Infantiles SOS pone en valor el papel de los abuelos y abuelas en la crianza de sus nietos mediante la publicación del informe Abuelos y abuelas, ¿qué haríamos sin ellos? El estudio incluye testimonios de abuelos y abuelas, observaciones de profesionales del cuidado y el análisis de expertos acerca del edadismo, de la soledad no deseada y de la economía de la longevidad. La organización de atención directa a la infancia, además, reivindica la labor de los abuelos y abuelas acogedores y reclama mayores apoyos y recursos que garanticen el completo bienestar de los niños y niñas bajo su cuidado.

En España, el 85 % de los abuelos y abuelas participan en el cuidado de sus nietos en algún momento, casi la mitad (46,7 %) lo hace de forma habitual y el 28,6 % realiza esta labor diariamente mientras sus hijos e hijas trabajan. Este apoyo es esencial para la conciliación entre la vida laboral y familiar de padres y madres en una sociedad en la que 1 de cada 5 personas tiene más de 65 años, y el 80 % de ellas son abuelos y abuelas. Y también será un factor clave en las próximas décadas, cuando se prevé que la población de más de 60 supere el 40 %.

Estos son algunos datos y análisis aportados por el informe Abuelos y abuelas, ¿qué haríamos sin ellos? El papel protagonista de las personas mayores en el cuidado a la infancia, realizado por Aldeas Infantiles SOS, que también recoge que apenas existen diferencias de género en esta labor y que el promedio de tiempo dedicado a ella es de 16 horas semanales.

Abuelos y abuelas siempre han desempeñado un papel esencial: transmiten la historia familiar, ofrecen cariño, consejo y apoyo emocional; y, en muchas ocasiones, ayudan económicamente y colaboran en el trabajo doméstico de sus hijos e hijas. Además, en los últimos años se han convertido en un pilar indispensable de la crianza para innumerables familias debido a las dificultades de conciliación. Es el caso de Antonella, que se mudó a Madrid desde su Italia natal para ayudar a su hijo en la crianza de sus dos nietas: “Ser madre y abuela es maravilloso, pero también es muy complicado”. Y el de Fernando, que cuida de sus nietos los fines de semana, ya que sus padres trabajan: “Para ejercer de abuelo hay que tener vocación, entrega y generosidad“.

“La presencia de los abuelos y abuelas en la crianza conlleva un mayor desarrollo cognitivo y bienestar emocional y social en los niños y niñas”, aseguran desde Aldeas Infantiles SOS. Además, las evidencias científicas sugieren que quienes cuidan ocasionalmente a sus nietos y nietas viven hasta cinco años más que quienes no lo hacen. “La relación cercana con los nietos brinda a los abuelos una sensación de propósito y satisfacción personal, y puede suponer un estímulo”, sostienen. No obstante, es clave marcar los límites necesarios para que el cuidado de los nietos no implique la renuncia del abuelo o abuela a áreas de valor como relacionarse con amigos, realizar actividades de ocio, o incluso disponer de tiempo libre para descansar. Tampoco podemos olvidar que la maternidad y la paternidad se producen a edades cada vez más tardías y eso hace que los abuelos sean cada vez más mayores, con las limitaciones que esto puede conllevar.

En este sentido, muchos de ellos se enfrentan al edadismo, una forma de discriminación arraigada en prejuicios y estereotipos que pueden alterar la percepción que tienen de sí mismos e inducirles a sentir soledad no deseada. Aldeas Infantiles SOS llama la atención sobre esta problemática que ya sufre una cuarta parte de las personas mayores solo por el hecho de serlo, y propone fórmulas para contrarrestarla.

“Las posibilidades de cooperación, intercambio e interacción entre generaciones son una oportunidad para el aprendizaje y el beneficio de todas las personas”, apuntan desde la organización. Su informe Abuelos y abuelas, ¿qué haríamos sin ellos? subraya cómo este diálogo intergeneracional conciencia sobre el papel de las personas mayores en la sociedad y reflexiona sobre la economía de la longevidad, que reconoce su capacidad de ahorro, inversión y consumo.

Para ellos y ellas, Aldeas reclama medidas que garanticen su bienestar a través del acceso a servicios de salud, espacios de descanso, oportunidades de participación activa y recursos para afrontar su rol de apoyo; así como fórmulas de conciliación efectivas por parte de empresas y de la Administración para que padres y madres puedan asumir plenamente su rol en la crianza.

Y reconoce especialmente el papel de los abuelos y abuelas acogedores, que adquieren un rol todavía más protagonista al convertirse en los cuidadores principales de sus nietos y nietas cuando, por diferentes motivos, se produce la pérdida del cuidado parental y los progenitores no están presentes.

Necesidades específicas de los abuelos y abuelas acogedores

De los 51.972 niños y niñas que crecen en España en el sistema de protección, 18.097 lo hacen bajo una medida de acogimiento familiar (el 51 %). De ellos, 10.706 (el 59,16 %) viven en la modalidad de acogimiento en familia extensa, es decir, con algún miembro de su familia biológica, en la mayoría de los casos, abuelos o abuelas que asumen el cuidado de sus nietos y se sitúan al frente de la unidad familiar hasta que sus padres superan las dificultades que provocaron la separación y es posible su reunificación.

En estos casos, el rol de los abuelos y abuelas cambia, ya que dejan temporalmente su papel tradicional, más vinculado con los momentos de ocio y juego, para asumir la responsabilidad de ser los cuidadores principales de sus nietos, con las obligaciones que esto implica. “No es fácil tener que ser a la vez la madre, que pone los límites, y la yaya, que tiene el rol de mimar al nieto”, explica Petri, abuela acogedora.

“Los abuelos acogedores necesitan apoyos y recursos durante todo el proceso de acogimiento y se enfrentan a una serie de desafíos como la diferencia generacional, la inseguridad ante sus habilidades parentales o el conflicto de lealtades“, afirman desde Aldeas Infantiles SOS.

Aldeas reclama servicios de orientación y asesoramiento personalizado, de mediación familiar, y atención psicológica, así como recursos formativos para mejorar sus habilidades en la crianza positiva y la construcción de vínculos seguros, redes de apoyo emocional y un mayor reconocimiento a su labor en la protección de la infancia.

Aldeas Infantiles SOS cuenta con programas de Apoyo al Acogimiento Familiar en Aragón, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Cataluña, Galicia y Madrid, desde los que acompañó en 2024 a 764 niños, niñas y adolescentes y a 625 familias, muchas de ellas formadas por abuelos y abuelas.

A través ellos, la organización acompaña y asesora a las familias en todo el proceso, velando siempre por el interés superior del niño y promoviendo vínculos afectivos seguros donde los niños y niñas, sus padres y madres, y las familias acogedoras sean los principales protagonistas, siempre en coordinación con los equipos técnicos de los Servicios Sociales.