Día Mundial del Acogimiento Familiar
En el Día Mundial del Acogimiento Familiar reflexionamos sobre cómo preparar emocionalmente el proceso de acogimiento en el núcleo familiar.

Cómo preparar a tu familia para el acogimiento familiar y acoger a un niño o niña niña
En España casi 52.000 niños y niñas crecen sin el cuidado de sus padres. Muchos de ellos, no solo están separados de sus progenitores, sino también de sus hermanos. El acogimiento familiar aporta una solución temporal hasta que estos puedan regresar con su familia de origen. Pero no consiste solo en abrir las puertas de un nuevo hogar, sino también abrir el corazón y demostrar compromiso.
Preguntas clave: motivaciones y expectativas
Antes de iniciar un proceso de acogida es fundamental reflexionar en familia sobre por qué tomar esta decisión y cómo se va a trabajar en conjunto. Estas son algunas preguntas clave que pueden ayudarte a tomar una decisión informada y responsable:
- ¿Por qué queremos acoger?
La motivación debe centrarse en priorizar en el bienestar del niño o la niña, no en suplir carencias emocionales propias. Es importante hacerse las siguientes preguntas: ¿Podemos acompañar a un menor de edad que necesita estabilidad? ¿Estamos dispuestos a ser un puente hacia su futuro, sabiendo que el acogimiento puede ser temporal? Y es que aunque en algunos casos puede prolongarse durante años, el objetivo principal suele ser que el niño regrese con su familia de origen.
- ¿Qué podemos ofrecer como familia?
Más allá de las razones económicas, la disponibilidad emocional y el tiempo son importantes. ¿Tenemos la capacidad para adaptarnos a una nueva dinámica familiar? ¿Podemos ofrecer un entorno seguro y afectuoso? Cada miembro del hogar va a vivir el acogimiento de forma diferente y tal vez haya que ajustar rutinas, renunciar a ciertos planes, o adaptar normas.
- ¿Cuáles son nuestros límites?
Es importante conocer vuestras propias limitaciones, preguntaros: ¿Qué tipo de acogida estamos dispuestos a asumir: de urgencia, temporal, permanente? ¿Podemos atender a un niño con necesidades especiales o a un adolescente?
- ¿Qué esperamos del proceso?
A veces proyectamos expectativas sobre cómo será el niño o niña acogido: ¿se integrará rápidamente, mostrará cariño, será agradecido…? Sin embargo, la infancia en situación de acogida han vivido, por definición, circunstancias difíciles. El acogimiento es una experiencia intensa; habrá momentos de alegría, pero también de desafío. ¿Esperamos gratitud inmediata o entendemos que puede haber rechazo, miedos o comportamientos difíciles debido a vivencias previas? No obstante, estos traumas psicológicos que muchos de ellos y ellas pueden experimentar se trabajan junto con el apoyo profesional y la nueva estabilidad familiar.

Hablar de acogimiento con el núcleo familiar
El acogimiento familiar no solo transforma la vida de la persona que es acogida, sino también impacta en todo el núcleo familiar, como los hijos biológicos o la familia extensa (abuelos, tíos o primos…).
Es interesante involucrar a los hijos e hijas biológicas desde el inicio del proceso. Para ello, explícales qué es el acogimiento, por qué se desea acoger y cómo puede cambiar la dinámica en casa. Algunos consejos que pueden ayudaros para prepararles emocionalmente son los siguientes:
- Dales espacio para que expresen dudas, miedos o preocupaciones.
- No idealices el acogimiento, sé realista sobre los retos que pueden surgir en la rutina diaria.
- Valida sus emociones, es probable que no todos los sentimientos sean positivos, sobre todo al principio.
- Hazles partícipes a través de pequeños gestos como preparar la habitación, elegir un juego, hacer un dibujo de bienvenida. Esto puede ayudar a que se sientan parte activa del proceso.
Por otro lado, entre la familia extensa puede haber desconocimiento y prejuicio, por lo que suele ser útil anticiparse:
- Explícales en qué consiste el acogimiento y su carácter temporal.
- Comparte aquello que os motiva a dar este paso.
- Pide respeto y confidencialidad hacia la vida privada del niño, que debe protegerse.
El acogimiento familiar es una experiencia transformadora. Sin embargo, es importante prepararse, contar con acompañamiento especializado, como el que realizamos Aldeas Infantiles SOS, y mantener una comunicación abierta con todos los miembros que forman parte del proceso. Esto es esencial para convivir con sensibilidad y responsabilidad.
Cómo acoger con Aldeas Infantiles SOS
En Aldeas Infantiles SOS trabajamos para garantizar el derecho de la infancia a crecer en familia. A través de nuestro proyecto AcogES+ buscamos casas con familia para niños, niñas y adolescentes bajo la tutela de la Administración que aún no han encontrado esa entorno que les acoja con los brazos abiertos.
El programa se desarrolla en las comunidades autónomas de Cantabria, Castilla-La Mancha, Galicia y Madrid. Nosotros trabajamos en coordinación con la Administración, ya que esta se encarga de la tutela de los niños, niñas y adolescentes que serán acogidos dentro de nuestro programa. Nosotros estamos presentes durante todo el proceso, ofreciendo apoyo a las familias y haciendo de intermediarios para facilitar todo el procedimiento entre la Administración y la familia acogedora.